Gracias por los ánimos
Anoche Llunita estaba muy apagada y no comió ni bebió nada. Intenté darle algo con la jeringa pero lo dejaba caer... Tenía la mirada perdida y no se movía... Ya esperaba lo peor. Esta mañana escuché ruido fuera y salí corriendo. Llunita estaba dentro de su caseta intentando incorporarse y la cabecita se le iba hacia los lados. Tenía poca temperatura, así que la envolví en una toalla y le acaricié la cabecita intentando calmarla. En un par de minutos y con algunos retuertos, dejó de respirar...
La he llevado esta mañana a la clínica donde se encargarán de ella sin coste alguno. También abrirán para ver exactamente qué pasó. Pero casi con toda certeza se ve que se le ha producido una fermentación en el intestino, pues tenía la caseta empapada con un olor fétido y con algunas heces blandas.
Sé qué era complicado por la complejidad en sí de la operación, además de que tenía el intestino por esa zona extremadamente fino y a eso se añade el problema de su bazo mucho más grande de lo normal. Aún así había que intentarlo porque en cualquier momento se le hubiera podido abrir el intestino.
Me da mucha pena que se haya tenido que ir tan pronto, ahora que estaba tan a gusto y feliz con los otros cones. Y penita de que haya pasado sus últimos días solita en el parque; ella protestaba que quería ir al otro lado con su querido Nilo...
Llunita, te echaremos de menos. Descansa en paz.