Bueno, como tristemente ya sabeis, volvemos a ser tres en casa (mi novio, Kayla y yo). Es muy díficil hacerse a la idea, sobre todo estando tan reciente
Hoy la pobre Kayliña no ha parado de estar en mis brazos recibiendo mimitos, además esta tarde no he ido a trabajar (mañana no quedará otra) y aprovechaba a cada rato para darle besos y achucharla, acostarla a mi lado...y también le he dado un buen cepillado de pelo.
Como imaginareis me estado rallando con la reciente pérdida de Milú, y entre sentirme culpable, el dolor, etc...también he sopesado y reflexionado cuestiones al respecto.
Mi novio y yo hemos decidido cambiar de veterinario, así que miraremos por Vigo otra clínica puesto que hemos perdido toda la confianza que pudieramos tener a la que íbamos hasta el momento.
No solo son cosas del momento díficil en el que estamos, lo hemos estado hablando con argumentos y reflexiones, y lo hemos decidido. Queremos lo mejor para Kayla, que es de quien nos toca cuidar ahora más que nunca.
Si bien al principio la clínica actual es la que más me gustó de las que viera, con el tiempo he visto cosas que no...
Lo primero en la esterilización de Kayla, no me dieron suficientes calmantes para ir dandoselos y que no pasara tanto dolor como pasó.
Ahí aún pensé que es que no querían atiborrarla a calmante o que no esperaban que sufriera tanto...no sé...
Vale, pero lo de Milú ya no tiene perdón. He pagado revisiones y radiografías y no solo no han dado con el diagnostico adecuado ni han buscado causas reales a sus gases (ellos trataban de buscar que podía haber de mal en la alimentación en vez de buscar otras causas. Incluso me habían dicho que no tenía bolas de pelo-justo el motivo del que murió).
Pero ya entre ayer y hoy me di cuenta de que no les importaba nuestro pequeño lo suficiente, que no habían tenido en cuenta todo lo que les había comentado: sangre en la jaula, caquitas blandas, etc.
Me he dado cuenta porque les pedi un certificado de fallecimiento de Milú y me han enviado al correo un informe, como un historial de Milú, donde parece ser que solo tratan de lavarse las manos de que no acertaran con el diagnostico y que en todo momento ellos hicieron lo mejor para el conejo.
Apuntaron en ese historial cosas de las que no tenían ni idea y habían omitido toda la información que yo les facilitaba sobre Milú telefonicamente y que era realmente importante como la cuestión de la sangre-Milú en la necropsia tenía una hemorragia- (todo ello supongo que para no dejar constancia de que ellos cometieron errores y no tuvieron en cuenta cosas importantes), y encima quieren hacerme parecer la culpable, cuando los veterinarios son ellos y los que tenían que decir que pasaba y como solucionarlo eran ellos.
Encima ayer después de perder a nuestro pequeño va la veterinaria y me dice :" siento haberos hecho perder el dinero y el tiempo". Justo las dos cosas que nos importaban un pepino (como si hubiera que pagar el triple con tal de tenerlo hoy aquí), y lo único que nos importaba, nuestro Milú, quedó exento de esa frase...Con lo cual, ya me lo han dejado claro, y ahora que me he dado cuenta, no quiero cometer el error de que ellos traten a mi Kayla si es necesario.
No compres, adopta.