¡Hola!
Me presento, soy Mary y soy la casa de acogida de Audrey con la que me estreno en el mundo conejil, de manos de Alba (¡mi mejor maestra!) que me está enseñando poco a poco todo lo que desconozco de éstos bichejillos.
No sé gran cosa de conejos (aún) pero lo que sí puedo decir de ella es que es un absoluto encanto de conejita, aparte de guapa (¡que salta a la vista!) es muy buena y limpita, hace todo en su esquinera (como ya me contó Alba durante el tiempo que estuvo con ella
) y cuando está por la habitación investigando, vuelve a su jaulita y a su esquinera, no mancha nada... es más... la que mancha la habitación soy yo que cada vez que lleno la henera esparzo la mitad por fuera jajaja.
La verdad es que empezar la andadura conejil de la mano de ésta preciosidad ha sido una gran idea, así que con eso se certifica que Audrey es apta para cualquier familia, incluso para los que, como yo, no entendemos mucho (aún) de éstos orejuditos, una conejita ideal para iniciarse en el mundo conejilamoroso.
Audrey aún lleva poquitos días en casa, así que aún está acostumbrándose a ésta casa "de locos", pero no lo hace nada mal, con ella yo también estoy aprendiendo cositas que no sabía, como por ejemplo, que tengo una estanteria que es un parque de atracciones con muchos escondites o que el diccionario de francés de mi amigo debe ser un juguete divertidísimo jajajaja.
Tiene muy buen carácter, se enfada muy poco y si lo hace es con razón
Come muy bien aunque no es una tragona.
Muy limpita.
Muy muy muy muy guapa.
¡Si es que lo tiene tó bueno!
No puedo dejar de dar las gracias a Alba por hacer la parte más difícil, no sólo rescatarla, si no enseñarla a comer bien, porque la pobre ni eso sabía, y por ayudarla con su parto y con el cuidado de su bebé... vamos, que ella ha hecho todo lo difícil y yo nada más estoy disfrutando de lo buena que es.
Besicos a todos y ya os seguiré contando