Aunque la decisión es de ANAC, no entiendo estos últimos comentarios y menos después de lo que he escrito sobre el porque no la estamos intentando socializar.
Creo que todos preferiríamos soltar a Nika y pensé que esto había quedado claro.
Sin embargo, la decisión de soltarla (…y cuando ….y como) no es tan simples. La coneja aun esta delgada y débil y si la soltamos ahora es probable que se moriría en pocos días. Al mismo tiempo, si esperamos mucho tiempo para que se ponga fuerte y para que el clima sea ideal (en el invierno encuentran menos comida) es posible que pierda su capacidad de vivir independiente en la naturaleza, pero que nunca se sienta cómoda con los humanos (lo mas probable, especialmente si no se intenta socializarla cuando aun es joven) y que esto le condene a pasar su vida incomoda y triste en cautividad. El problema es casi un “Catch 22”.
Un conejo de campo rescatado que tiene que pasar un tiempo largo como Nika en cautividad siempre es un caso especial y complicado. Hagamos lo que hagamos hay varios riesgos importantes y tenemos que ser muy cuidadosos y estudiar el caso para escoger la opción que los minimiza.
Por desgracia tampoco tenemos mucha información disponible que nos ayude a tomar decisiones bien informadas. Hay pocos informes o estudios que han sido hechos sobre sueltas de conejos de campo, y aun menos sobre conejos que han vivido algún tiempo en cautividad. La mayoría de estudios disponibles son 1). sobre conejos que NO han pasado mas que una semana lejos de su hábitat y, siendo así, se cree que pueden reintroducirse en sus comunidades anteriores con cierta facilidad, o 2) para la repoblación y cría de conejos para servir de alimento en la reintroducción del Lince, o 3) para repoblación en los cotos de caza. En la mayoría de los casos de los estudios (2 y 3), se les han construido varias madrigueras artificiales antes de las sueltas, para que ya tengan refugios abiertos disponibles, así que tampoco son tan indicativos.
Por lo que he visto en algunos estudios existe un riesgo grande de que no dejen entrar a un conejo en una madriguera. Como las madrigueras naturales se suelen construir entre varios conejos, hasta que un conejo sea aceptado en una madriguera puede estar en una situación muy vulnerable. Sin madriguera el conejo esta muy expuesto al clima (las madrigueras, por su sistema de túneles, tienen una temperatura bastante estable que protege muchísimo del calor y el frío) y, sobretodo esta muy expuesto a los depredadores.)
Según lo que he leído lo ideal es soltarles en la primavera, cuando es mas fácil encontrar alimentos. También es ideal hacerlo de manera “suave”, dejándolos en un mini refugio protegido por malla que contiene comida y agua, del cual el conejo se escapará excavando por si solo cuando se siente preparado. (Se cree que mucho conejos pueden quedar demasiado asustados para buscar refugio y comida con una suelta dura.)
De todas formas, Nika no está en condiciones para ser retornada a su hábitat en estos momentos. Es difícil vivir en la naturaleza, y mucho más para una coneja que aun se está recuperando. Hasta que engorde y la veterinaria le de el visto bueno, creo que solo podemos prepáranos para intentar tomar la mejor decisión.
(También sigo optimista con el santuario, y aunque aun estamos en negociaciones, se cree que esto será firmado este año y en mi opinión, si se consigue, el santuario sería la mejor solución para Nika y otros conejos silvestres que están en situaciones parecidas.)
Os dejo con la buena noticia de que Nika hoy pesa 785 gramos! (Ha ganado105 gramos desde la ultima visita al veterinario).